Por ello, aunque animada en participar, sabía que me acompañaba cierta inconsciencia por pedirle a mi cuerpo un esfuerzo para el que no habíamos entrenado. Enseguida pensé en que necesitaba todas las ayudas extra que pudieran facilitarme el recorrido y los aceites esenciales iban a serlo una vez más.
Para antes de la carrera (aplicaríamos una media hora antes), preparé una sinergia que me ayudara a calentar los músculos para evitar en el momento de la salida y del recorrido una distensión muscular. Utilicé un aceite base vegetal de almendras y de cáñamo al que añadí aceites esenciales que tuvieran en global propiedades tónicas-musculares y ligeramente anestesiantes como el romero alcanfor, gaulteria, menta piperita, canela y jengibre.
Las proporciones son las siguientes y la aplicaríamos en las piernas con un masaje desde los tobillos hasta los muslos:
-100 ml. aceite base vegetal (almendras y cáñamo)
-2 ml. (60 gotas) romero alcanfor. Rosmarinus officinalis - qt alcanfor. Acción neuromuscular y antiálgico.
-2 ml. (30 gotas) gaulteria. Gaultheria procumbens. Antiálgico, vulnerario, antiespasmódico
-2 ml. (30 gotas) menta piperita. Mentha x piperita. Anestésico, analgésico, tónico y estimulante general
-0´5 ml. (15 gotas) de canela de China. Cinnamomum cassia. Potente tónico del sistema nervioso simpático y estimulante general.
-0´5 ml. (15 gotas) de jengibre. Zingiber officinale. Tónico general, descongestionante venoso y linfático
Justo en el momento antes de salir, me apliqué 10 gotas de la esencia sagrada de Ámbar Rojo que trabaja sobre el primer chakra, es decir, a nivel corporal sobre las piernas. Las apliqué con un roll on en la zona de los riñones pues de esta manera activé las glándulas adrenales y suprarenales que aportan vitalidad, energía y aumenta el estado de alerta.
El resultado y la experiencia fue muy buena pues a pesar de que hacia el 3 km. se empezó a notar el cansancio, en ningún momento hubo necesidad de parar ni sentí dolor en las piernas durante todo el trayecto.
Después de la carrera y del esfuerzo, podemos emplear también los aceites esenciales y vegetales para aliviar el dolor muscular que puede aparecer y también para relajar el sistema muscular que ha sido sometido a un sobreesfuerzo. Lo emplearíamos durante 3 veces al día unos 3 días (o el tiempo necesario hasta que desaparezcan las molestias, si las hay)- En este caso, la sinergia que podemos preparar y las proporciones son las siguientes:
-100 ml aceite vegetal (macerado de árnica y cáñamo o sésamo). Se utiliza en casos de articulaciones con síntomas de rigidez y tensiones musculares.
-2 ml. eucalipto azul (60 gotas). Eucalyptus citriodora. Potente antiinflamatorio, antiálgico, relajante cutáneo. Alivia los dolores y los espasmos musculares, también muy provechoso combatir el dolor y la inflamación articular.
-2 ml. gaulteria (60 gotas). Gaultheria procumbens. Antiálgico, vulnerario, antiespasmódico.
-2 ml. lavanda (60 gotas) Lavandula angustifolia ssp angustifolia. calmante, sedante, antiálgico notable.
-1 ml. ciprés (30 gotas). Cupressus sempervirens var. stricta. Alivia los espasmos, los calambres y las dolencias musculares y articulares cualquier etiología y localidad. Activa la circulación.
-1 ml. lemongrass (30 gotas). Cymbopogon citratus Reajusta el tejido cutáneo, alivia dolores musculares y de ligamentos. Ayuda en el tratamiento de las contracturas musculares y artralgias.
Tras el esfuerzo, es recomendable también un baño, ya sea de pies o del cuerpo entero, con sales del Mar Muerto por su alto contenido en minerales con propiedades analgésicas, antiinflamatorias y relajantes. Nos ayudará a reducir el dolor muscular, articular y óseo. La proporción sería de 1 cucharada de sal en 1 litro de agua durante 20 minutos.
En este enlace podéis ver otros productos ya terminados con base de aceites vegetales y esenciales.
http://vimeo.com/33024278
¡Y a disfrutar de los kilómetros, del paisaje, de las sensaciones!
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